Para mi madre
Para mi madre
Es brisa marinera
que va y bien sin parar.
La que en la distancia me abraza
desde la Punta del Moral,
con el susurro del viento
Me impregna con olor a sal.
La mujer más bonita que en mi
mente siempre está,
la que me dio la vida
y no la puede olvidar.
Es mi madre de mi alma
que en mi corazón la tengo que grabar.
Querida Mamá,
Esta carta va dirigida a mi madre “Ana María Belmonte Casado”, mujer, madre de cinco hijos y mujer marinera. Decirte que eres la estrella más grande del universo, la mujer más valiente y trabajadora del mundo: enfermera, ama de casa, madre de sus hijos, mujer de su marido y luchadora por todo lo que le ha dado la vida. Decirte que para mí eres el tesoro más maravilloso que he tenido desde que Dios me dio la vida.
No has tenido una vida muy feliz, como tú te merecías. La vida te ha hecho sufrir desde pequeña y a lo largo de tu vida. Pero siempre has salido de todo por tu valentía. Desde muy pequeña has tenido que trabajar. “La vida no fue muy fácil” con 8 hermanas y con los tiempos malos que pasaron, pero la vida os fue ayudando a seguir adelante. También serías una mujer maravillosa, cuando mi padre se enamoró de esta mujer “morena”, la más bonita de todas.
¡Te enamoraste del marinerito rubito! Y de ahí tus 5 hijos, que te adoran. Aunque no ha sido todo bonito en tu vida, siempre has luchado, porque eres una mujer valiente.
Sé que los mejores años de tu vida los pasaste trabajando en el campo y yo a tu lado de compañera. La mejor compañera de trabajo que he tenido en mi vida, la mejor madre del mundo.
Con 22 años me fui de tu vera, pero gracias a tus valores que me has ido dando en la vida he ido superando todos los obstáculos.
Todos los días te tengo que llamar por teléfono para escuchar tu voz. Solo con oírte me das vida. Te quiero tanto que, si pudiera, pasaría toda mi vida a tu vera. Tu sonrisa, tu mirada, tus enfados son parte de mi alma. Todos los fines de semana tengo que verte, tocarte y besarte para recuperar fuerzas para la semana.
Sueles decir muchas veces “cada uno tenéis ya vuestra vida” entonces yo te digo que tú eres mi vida. Todos los días te tengo que nombrar y con mucho orgullo te digo “Mi madre es la mejor del mundo”.
Parece que no se cansa, ni sufre, pero no es cierto, ya está cansada de todo, enfada con la vida. Pero tiene que saber que no me canso de quererla.
Las 24 horas del día se las dedicaría a ella. Cierro los ojos y la veo siempre a mi lado para todo. En los dos partos de mis hijos ¡Ay qué valiente! En los momentos que me ha hecho falta, ella siempre ha estado ahí.
Mamá te quiero muchísimo, mi morenita bonita. Mi marinerita.
Un beso
Ana M Orta.